CRISIS ASISTENCIAL
Médicos y sociedades científicas piden un debate basado en evidencia antes de modificar el sistema
Más de 10.000 servicios cerrados y 2.033 fallecimientos en patologías de alto riesgo sustentan el llamado de alerta
Martes, 09 de diciembre de 2025, a las 15:04
Agamenón Quintero, presidente de la ACSC.
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Redacción. Bogotá
La Asociación Colombiana de Sociedades Científicas (ACSC) ha hecho un llamado directo a los senadores de la Comisión Séptima para que el
reinicio del debate del Proyecto de Ley 410 de 2024, que propone una reforma estructural al sistema de salud, se realice bajo criterios técnicos, de responsabilidad pública y con plena conciencia del
impacto sanitario que implica.
En un comunicado oficial, el gremio ha alertado que
el país enfrenta una crisis asistencial sin precedentes, con cierres de servicios, desabastecimiento de medicamentos y deterioro progresivo de las condiciones laborales del talento humano en salud, problemas que, aseguran, se han profundizado en los últimos tres años.
La ACSC ha subrayado que, mientras el Gobierno insistía en la necesidad de una reforma estructural, el sistema continuó debilitándose. Entre los datos presentados destacan:
-2033 fallecimientos reportados entre enero y noviembre de 2025 en personas con enfermedades huérfanas y patologías de alto riesgo, según ha indicado FECOER, muchos de ellos asociados a fallas en continuidad de tratamientos.
-10.049 servicios de salud cerrados en 2024, de acuerdo con la Unión de IPS, sin información clara sobre la reubicación de pacientes o la situación laboral del personal afectado.
A estas cifras se suma el testimonio de la médica
Zaira Reyes durante la visita presidencial al Huila, citado en el comunicado, donde señaló problemáticas persistentes como
contratación por prestación de servicios, politización en el nombramiento de personal en ESE públicas, recortes injustificados y fallas en el suministro de medicamentos.
“Estas barreras vulneran la autonomía médica y afectan la seguridad del paciente”, ha remarcado la ACSC, recordando que estos elementos son principios reconocidos en la Ley Estatutaria de Salud (1751).
Incertidumbre financiera y riesgos estructurales
El gremio también cuestionó la viabilidad económica de la reforma planteada. Con base en documentos oficiales, advierte que
la transición requeriría al menos tres años, periodo en el cual las fallas actuales podrían profundizarse.
Asimismo, han resaltado que
no existe respaldo financiero sólido, luego de que el Ministerio de Hacienda condicionara la sostenibilidad del proyecto a una Ley de Financiamiento que podría ser archivada.
Según ha precisado la ACSC, centralizar múltiples funciones en la ADRES
sin claridad operativa ni soporte jurídico suficiente “abre la puerta a un retroceso en el derecho a la salud”, lo que contravendría el principio de progresividad exigido por la Ley Estatutaria.
Rigor técnico y responsabilidad pública
De ese modo, la Asociación ha hecho énfasis en que la discusión legislativa debe ir más allá de posiciones políticas. “La salud de todos los habitantes del territorio nacional está en sus manos”, ha puntualizado el presidente de la ACSC,
Agamenón Quintero, quien pidió
evaluar el proyecto con “serenidad, valentía y responsabilidad”.
El gremio ha expresado nuevamente su disposición a
acompañar un proceso de construcción de una reforma robusta, financieramente sostenible y basada en evidencia. Sin embargo, advirtió que aprobar el proyecto en su forma actual podría profundizar la crisis: “habrá más vidas afectadas, más servicios cerrados y más pacientes desprotegidos”.
“La Salud no admite improvisaciones. La vida de millones de colombianos está en sus manos”, se ha concluido en el comunicado.