Edición Médica

La comunidad Emberá está compuesta por más de 400 indígenas provenientes de Risaralda y Chocó.

Redacción. Bogotá
La conmoción se ha hecho presente en Bogotá, debido al fallecimiento de un niño de 5 años, miembro del pueblo indígena Emberá Katío y bajo el cuidado de su abuela. De acuerdo con la Secretaría Distrital de Salud, el infante había llegado a la Unidad de Protección Integral – UPI La Rioja en Bogotá.
 
Conforme al avance de los hechos, el 27 de diciembre de 2023, la Unidad de Atención Integral Comunitaria de la Secretaría Distrital de Salud evaluó al niño, identificando una infección respiratoria aguda. Se proporcionaron indicaciones de cuidado y signos de alarma, y los gestores de salud continuaron su seguimiento en los días siguientes.
 
Entre el 30 y el 31 de diciembre, la comunidad Emberá no permitió el acceso de la Unidad de Atención Integral Comunitaria a la UPI La Rioja. El 1 de enero de 2024, a las 9:00 a.m., los gestores identificaron signos de alarma durante sus rondas en La Rioja. El niño presentaba síntomas como dificultad respiratoria, diarrea y vómito. A las 9:25 a.m., fue trasladado a la ambulancia frente a La Rioja y, a las 9:45 a.m., al Hospital Santa Clara, ingresando por urgencias y siendo trasladado a la unidad de cuidados intensivos pediátricos.
 
A pesar de los esfuerzos del equipo médico, el niño había permanecido en la unidad de cuidados intensivos desde el 1 hasta el 11 de enero. Trágicamente, el jueves 11 de enero de 2024, falleció a causa de una disfunción orgánica múltiple, condiciones que se originaron en su llegada desde el territorio.
 
De acuerdo con la Secretaría, en la red de prestación de servicios de salud en Bogotá, actualmente hay 13 niños Emberá hospitalizados. Es imperativo que los equipos de salud y la Unidad de Atención Integral Comunitaria tengan acceso constante a la población Emberá en La Florida y La Rioja para evitar situaciones críticas.
 
La Secretaría Distrital de Salud hace un nuevo llamado al Gobierno Nacional para que reconozca la emergencia que afecta a esta población. También insta al Puesto de Mando Unificado (PMU) a tomar decisiones fundamentales para permitir que los integrantes de estas comunidades indígenas en la ciudad puedan regresar a su territorio de origen, mejorando así sus condiciones de vida y garantizando sus derechos, especialmente los de niños, niñas y mujeres.
 
Es relevante mencionar que la comunidad Emberá, compuesta por más de 400 indígenas provenientes de Risaralda y Chocó, ha encontrado refugio en el Parque Nacional de Bogotá desde hace cuatro meses. Estas personas, desplazadas por diversas circunstancias, han optado por buscar mejores condiciones de vida estableciéndose en la capital colombiana.
 
El dato
 
Ante la incertidumbre que enfrenta la comunidad Emberá sobre su futuro, se ha convocado a una reunión el lunes 15 de enero de 2024, con entidades estatales, para abordar la potencial reubicación de los indígenas en un terreno en Beltrán (Cundinamarca). Esta asamblea representa una oportunidad crucial para determinar el destino de aquellos que buscan un refugio seguro.

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