Edición Médica

Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS.

Redacción. Bogotá
Debido a la detección de un primer caso de la enfermedad provocada por el virus de Marburgo en Guinea, ha puesto al mundo en alerta por una posible emergencia en salud a nivel global. Según ha indicado la Organización Mundial de la Salud (OMS), el caso se reportó en un hombre que falleció el pasado 2 de agosto y que presentó síntomas el 25 de julio.
 
De acuerdo con lo explicado por las autoridades sanitarias, el virus se ha identificado tras la toma de muestras realizada al paciente fallecido, luego fueron analizadas en el Laboratorio Nacional Guineo de la fiebre hemorrágica.
 
Asimismo, la OMS ha indicado que este virus forma parte de la familia de los filoviridae (filovirus), como el Ébola, con el que ha compartirdo varias características, el cual se transmita al ser humano a través de los murciélagos de la fruta (rousettus), considerados como los huéspedes naturales de este virus.

Adicional a ello, la OMS ha explicado que la infección humana se debe a la exposición prolongada a minas o cuevas que están habitadas por los murciélagos (huéspedes del virus). Posterior a ello, la transmisión del virus puede darse por contacto directo con sangre, secreciones o cualquier otro fluido corporal de la persona infectada. De igual forma, el virus se puede contagiar por el contacto con superficies y materiales, como la ropa, que estén contaminados con los fluidos corporales de la persona enferma.

Incertidumbre sobre los síntomas
 
La OMS ha dado a conocer un dato clave sobre el periodo de incubación de este nuevo virus, el cual está entre los dos y los 21 días, es decir, puede transcurrir todo este tiempo entre el momento de la infección y la aparición de síntomas del virus de Marburgo.
 
Adicional a ello, la OMS ha indicado que esta enfermedad presenta un comienzo brusco, que está marcado por fiebres altas, cefalea intensa y mucho malestar general. También puede ocasionar dolores musculares, diarrea, náuseas, vómito y dolores abdominales, que suelen aparecer hacia el tercer día del inicio de los síntomas.
 
“En esta fase los pacientes tienen un aspecto que se ha descrito como ‘de fantasmas’, con hundimiento de los ojos, rostro inexpresivo y aletargamiento extremo. En el brote europeo de 1967 la mayoría de los pacientes presentaron una erupción cutánea no pruriginosa 2 a 7 días después del inicio de los síntomas”, ha recalcado la OMS.
 
Cabe mencionar, que cuando una persona recibe un diagnóstico de esta enfermedad esto representa un difícil panorama, ya que, los síntomas de este virus son similares a los de otras enfermedades infecciosas. Sus múltiples manifestaciones que, según ha señalado la OMS, pueden parecerse a las del paludismo, la fiebre tifoidea, la meningitis y otras fiebres hemorrágicas.


Para la detección de este nuevo virus, la OMS ha indicado que se puede hacer con las siguientes pruebas:
   
El dato
 
La OMS ha informado que, el virus también causa manifestaciones hemorrágicas que pueden ser graves y que pueden presentarse hacia los 5 o 7 días de síntomas. Puede haber sangrado en nariz, encías y en el vómito o las heces. Los pacientes que fallecen por el virus suelen tener hemorragias que pueden ocurrir incluso en múltiples órganos, y la fase más grave de la enfermedad está marcada por la persistencia de la fiebre elevada.

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