ACCIÓN MULTISECTORIAL.
OMS alerta que el progreso contra la tuberculosis está en riesgo por falta de financiación
El informe mundial 2025 advierte que los avances en diagnóstico, tratamiento e innovación podrían frenarse si no se incrementan los recursos
Jueves, 13 de noviembre de 2025, a las 10:35
Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS.
|
Redacción. Bogotá
La tuberculosis (TB) continúa siendo una de las enfermedades infecciosas más letales del planeta. Según ha resaltado el Informe Mundial sobre la Tuberculosis 2025 de la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de
1,2 millones de personas murieron y
10,7 millones contrajeron la enfermedad en el último año.
A pesar de que la tasa global de incidencia y mortalidad se ha reducido, 2 y 3 por ciento respectivamente entre 2023 y 2024, la OMS advierte que
la falta de financiación y las brechas en acceso equitativo a la atención amenazan con revertir los logros alcanzados.
“Es inconcebible que la tuberculosis siga cobrando más de un millón de vidas cada año, siendo prevenible y curable”, ha afirmado
Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, quien reiteró el llamado a
acelerar las acciones hacia su erradicación para 2030.
Entre 2015 y 2024, regiones como África y Europa registraron avances notables: reducciones de hasta 46 por ciento en las muertes y 39 por ciento en la incidencia. Sin embargo, la
carga mundial se concentra en 30 países, principalmente India, Indonesia, Filipinas, China, Pakistán, Nigeria, la República Democrática del Congo y Bangladesh, que representan el
67 por ciento de los casos globales.
El tratamiento oportuno ha permitido
salvar cerca de 83 millones de vidas desde el año 2000, gracias al aumento de diagnósticos, pruebas rápidas y tratamientos más eficaces. En 2024, el 88 por ciento de los tratamientos para TB sensible a los medicamentos fueron exitosos y más de 5,3 millones de personas en riesgo recibieron terapia preventiva.
El informe también ha subrayado la importancia de la
protección social y la acción multisectorial para abordar determinantes como la pobreza, desnutrición, VIH, diabetes, tabaquismo y consumo de alcohol. No obstante, la cobertura de protección social en los países con mayor carga de TB sigue siendo desigual: apenas 3,1 por ciento en Uganda frente al 94 por ciento en Mongolia.
Financiamiento: el talón de Aquiles
La OMS ha advertido que la financiación global para la
lucha contra la tuberculosis permanece estancada desde 2020. En 2024, los recursos destinados (5.900 millones de dólares) representaron solo una cuarta parte del objetivo anual de 22.000 millones fijado para 2027.
De mantenerse esta tendencia,
los recortes proyectados a partir de 2025 podrían causar hasta 2 millones de muertes adicionales y
10 millones de nuevos casos entre 2025 y 2035.
En investigación, el panorama tampoco es alentador: solo se alcanzó
el 24 por ciento de la meta global, aunque actualmente se desarrollan 63 pruebas diagnósticas, 29 fármacos y 18 vacunas candidatas, seis de ellas en fase III.
“Nos encontramos en un momento decisivo. Los
recortes presupuestarios y los factores estructurales que
alimentan la epidemia amenazan los avances logrados. Con compromiso político e inversión sostenida podemos acabar con este antiguo asesino”, ha señalado
Tereza Kasaeva, directora del Departamento de VIH, Tuberculosis, Hepatitis e ITS de la OMS.
La OMS insiste en la necesidad de
reforzar el compromiso político, aumentar la inversión nacional y acelerar la investigación, pilares esenciales para mantener la tendencia descendente y cumplir el objetivo de poner fin a la tuberculosis antes de 2030.