Edición Médica

Programas de vacunación en lugares remotos de Colombia.

Redacción. Bogotá
Entre 2023 y 2025, la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS), en articulación con el Ministerio de Salud y Protección Social y las secretarías departamentales y municipales de salud, y con el apoyo del Gobierno de Canadá, ha contribuido de manera significativa al fortalecimiento del Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI) en Colombia, con énfasis en la reducción de inequidades y la mejora de la capacidad de respuesta frente a emergencias sanitarias.
 
La cooperación se ha desarrollado en el marco del proyecto “Mejorando el acceso equitativo y la cobertura de la vacunación de Covid-19 en Latinoamérica y el Caribe”, el cual permitió avanzar en el fortalecimiento del talento humano, la cadena de frío, los sistemas de información, la vigilancia epidemiológica y las estrategias de comunicación comunitaria, priorizando territorios rurales, comunidades indígenas y zonas de frontera.
 
Durante el periodo de implementación, más de 10.000 profesionales de la Salud fueron capacitados en componentes clave del PAI, como microplanificación, vacunación segura, vigilancia de eventos inmunoprevenibles, farmacovigilancia y respuesta a emergencias. Este fortalecimiento se tradujo en mejoras en la calidad, seguridad y oportunidad de los servicios de vacunación a nivel territorial.
 
En departamentos de difícil acceso, como Amazonas y Putumayo, se implementaron soluciones logísticas innovadoras, entre ellas la dotación de transporte fluvial y la instalación de un punto de vacunación autosustentable en La Chorrera, que permitió ampliar el acceso a comunidades históricamente excluidas y aumentar las coberturas de inmunización.
 
Adicional a ello, se han invertido más de un millón de dólares en equipos de cadena de frío, fortaleciendo la vacunación extramural en 13 departamentos y beneficiando a millones de personas, incluso en contextos de alta dispersión geográfica y limitada conectividad eléctrica.
 
En materia de preparación y respuesta, la OPS/OMS ha apoyado el fortalecimiento de los Centros de Operaciones de Emergencias (COE) a nivel nacional y territorial, la realización de simulaciones multiamenaza y la articulación entre vigilancia epidemiológica, laboratorios y servicios de vacunación.
 
Estas acciones permitieron una respuesta más rápida y coordinada frente a brotes de enfermedades inmunoprevenibles como fiebre amarilla, sarampión y tos ferina, contribuyendo a la continuidad de los servicios esenciales de vacunación en escenarios de emergencia climática, conflicto armado y alta movilidad poblacional.
 
El proyecto también ha impulsado la modernización de los sistemas de información, integrando variables como etnia y pertenencia a pueblos indígenas en el sistema nominal PAIWEB, y fortaleciendo la Red Nacional de Laboratorios de Salud Pública. Esto permitió mejorar la detección temprana de brotes y mantener el estatus de Colombia como país libre de sarampión, rubéola, síndrome de rubéola congénita y poliomielitis.
 
Evidencia, comunicación y enfoque de género
 
Como parte de la estrategia integral, se desarrollaron estudios sobre percepciones y barreras a la vacunación en comunidades indígenas, personas con discapacidad y otros grupos vulnerables, generando evidencia para el diseño de intervenciones culturalmente pertinentes y con enfoque de género.
 
Asimismo, se han implementado campañas de comunicación de riesgo y participación comunitaria para enfrentar la desinformación y fortalecer la confianza en la vacunación como un derecho y un bien público. El enfoque de género se transversalizó mediante acciones de sensibilización comunitaria y el empoderamiento de lideresas, parteras y organizaciones de mujeres en territorios como La Guajira y Caquetá.
 
Los resultados alcanzados han evidenciado el impacto de la cooperación técnica de la OPS/OMS y el aporte del Gobierno de Canadá en la reducción de brechas de acceso, el fortalecimiento de las coberturas de vacunación y la preparación del país frente a emergencias sanitarias, incluido el control del brote de fiebre amarilla más grande registrado en Colombia en las últimas dos décadas.
 

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