OPS advierte sobre alto riesgo de fiebre amarilla en las Américas: Colombia entre los países más afectados
La baja cobertura de vacunación y la aparición de casos fuera de zonas amazónicas elevan el riesgo de brotes urbanos, según nueva evaluación de la OPS
Cerca del 15 por ciento puede desarrollar formas graves con daño hepático y multiorgánico.
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Redacción. Bogotá
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha emitido una nueva Evaluación Rápida de Riesgos (RRA) sobre la fiebre amarilla en la Región de las Américas, en la que advierte que el riesgo para la salud pública continúa siendo
alto, especialmente por el aumento exponencial de casos y la persistencia de transmisión en áreas endémicas. En lo corrido de 2025, se han reportado
221 casos humanos confirmados, incluyendo
89 defunciones, lo que representa un incremento de más de
ocho veces respecto al mismo periodo del año anterior.
Colombia es uno de los países con mayor número de casos, con
64 personas infectadas y 26 fallecimientos, ubicándose solo detrás de Brasil en el número total de casos. Preocupa especialmente la aparición de infecciones en zonas fuera de la región amazónica, como el departamento de
Tolima, lo que, según la OPS,
aumenta significativamente el riesgo de un brote urbano, como ocurrió en el brote de 2016-2018 en Brasil.
Vacunación insuficiente
La OPS ha resaltado que
casi todos los casos reportados tanto en 2024 como en 2025 ocurrieron en
personas no vacunadas. Antes de la pandemia de COVID-19, las coberturas vacunales ya estaban por debajo del 95 % recomendado en 10 de los 12 países endémicos, y
la pandemia agravó aún más esta situación, dejando a una proporción considerable de la población sin protección.
Pese a la mejora en las capacidades operativas de los países, el
limitado suministro global de vacunas representa un obstáculo para ampliar la cobertura en la región, especialmente en comunidades rurales y dispersas.
Llamado urgente a reforzar vigilancia y cobertura vacunal
En su evaluación emitida el 23 de mayo, la OPS recomienda a los países:
-Fortalecer la vigilancia epidemiológica, particularmente en zonas limítrofes a áreas densamente pobladas.
-Incrementar la vacunación en poblaciones de riesgo, incluso mediante el uso de dosis fraccionadas si es necesario.
-Mejorar la comunicación de riesgo, con estrategias dirigidas a comunidades afectadas y personas que viajan a zonas con recomendación de vacunación.
Asimismo, la organización continúa trabajando con los países endémicos para brindar
asistencia técnica, identificar zonas prioritarias e implementar medidas integrales de prevención y respuesta.
La fiebre amarilla es una enfermedad viral hemorrágica aguda,
endémica en zonas tropicales de América y África. En las Américas, su transmisión ocurre principalmente por mosquitos selváticos del género Haemagogus y Sabethes. El cuadro clínico inicial incluye fiebre, mialgias, cefalea, escalofríos y náuseas. Aunque la mayoría de los pacientes se recupera, cerca del 15 por ciento puede desarrollar formas graves con daño hepático y multiorgánico, con una letalidad elevada.