Edición Médica

Abdiel Mateus Herrera, vocero de Veeduría de Plan de Vacunación.

Karen Juliete Rojas Gaitán. Bogotá
La Veeduría al Plan de Vacunación ha insistido al Gobierno Nacional en la necesidad de adoptar decisiones más oportunas, certeras y acertadas en la gestión que se está dando a la cuarta ola de contagios, pues los lineamientos definidos por el Ministerio de Salud el pasado 7 de enero de 2022 suscita múltiples interrogantes y preocupaciones.
 
“Asuntos como la limitación de los testeos a los casos sintomáticos, la reducción del tiempo de aislamiento y la logística de los puntos de vacunación reclaman mayores claridades para con la ciudadanía, por lo que planteamos reflexiones y recomendaciones para disminuir los riesgos colectivos asociados a la pandemia en la actualidad”, ha indicado la Veeduría.
 
La agremiación también ha indicado que los datos científicos sobre la variable ómicron demuestran que provoca una mortalidad menor que su antecesora (variable delta), pero no significa que no pueda tener impacto grave en la salud y la vida de la población no vacunada y con comorbilidades de alto riesgo.
 
En entrevista con EDICIÓN MÉDICA, Abdiel Mateus Herrera, vocero de Veeduría de Plan de Vacunación, ha dicho que “le proponemos al Gobierno Nacional ampliar las redes de emergencia en cuatro picos de contagios, lo que pretendemos es que se explore la posibilidad de instituir hospitales de emergencia, así como en algún momento se hizo con la red de emergencias y cuidados intensivos para poder responder con mayor integridad a los usuarios ante esta variable”.
 
“Buscamos el acceso integral al servicio de salud no sea restringido y se le pueda brindar al mayor número de personas posibles, por lo que también es importante reconocer que, aunque puede haber síntomas leves. No todos los pacientes necesariamente presentan síntomas leves y lo oportuno sería poder tener una valoración médica, por diferentes aspectos como la toma de pruebas, el tema de incapacidades, incluso por aspectos como medicamentos que fueran indispensables en esos momentos de extrema necesidad”, ha explicado Mateus Herrera.
 
Asimismo, el vocero ha afirmado que “a la fecha persisten barreras sociales e institucionales que no permiten acceso más generalizado a la vacuna. Se hace referencia a asuntos como horario laboral, horario de los puntos de vacunación, sobrecarga laboral del personal de vacunación, ausencia de un plan generalizado de vacunación puerta a puerta y la falta de centralización de la información sobre la disponibilidad real del número y tipo de biológicos por punto de vacunación”.
 
El vocero también ha hecho un llamado a las personas no vacunadas para que se vacunen, “pues son ellas las que tienen el mayor riesgo de enfermar gravemente y morir. La pedagogía sobre las vacunas reclama mayor profundización sobre las formas utilizadas para llevar el conocimiento y el convencimiento necesario a las personas que aún puedan tener temores. La forma como se transmite el mensaje de qué son y cómo funcionan las vacunas reclama mayor espacio en la agenda pública y mediática de los medios de comunicación: es necesario que se hable más de vacunas en espacios mediáticos a partir de la evidencia científica”.
 
Por último, Mateus Herrera ha enfatizado que no se debe restringir la atención de los pacientes, “y que hagan una valoración a los síntomas graves, sino que se pueda brindar el mayor acceso posible, al mayor número de personas posible y eso va de la mano con una ampliación de la planta de personal del sector salud, en donde es claro que se necesita mayor número de médicos”.
 
El dato
 
Durante la pandemia en el país se han perdido más de 130 mil vidas y en el mundo la cifra asciende a 5 millones y medio de personas. La Veeduría ha precisado que, la baja tasa de mortalidad de esta variable no puede ser pretexto para la inacción, pues hay cargas de mortalidad evitables, así como aspectos que reclaman mayor financiación y mayor transparencia, lo que significa que hay vidas que se pueden salvar con medidas más eficientes y menos simplistas.

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