Edición Médica

Carolina Corcho Mejía, ministra de Salud y Katsunobu Kat?, ministro de Salud, Trabajo y Bienestar de Japón.

Redacción. Bogotá
Colombia y Japón han concluido el proceso que le permitirá al país acceder a un importante lote de vacunas contra la viruela símica. El proceso se ha efectuado con la suscripción de un acuerdo bilateral entre la ministra de Salud y Protección Social, Carolina Corcho Mejía, y el ministro de Salud, Trabajo y Bienestar del Japón, Katsunobu Kat?.
 
Asimismo, la cartera de Salud japonesa ha confirmado el acuerdo en un pronunciamiento en el que asegura que la vacuna ha sido el resultado de un esfuerzo de cooperación entre la industria, la academia y el gobierno de Colombia.
 
Cabe mencionar que, el proceso para llegar al acuerdo se ha llevado a cabo en seguimiento de las recomendaciones formuladas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), según ha puntualizado el ministerio de Salud.
 
La gestión ha incluido la participación del médico infectólogo Carlos Álvarez, profesor investigador de la Universidad Nacional de Colombia, y representante de la OMS para estudios de COVID-19 en el país. De igual manera, se ha contado con el acompañamiento de un grupo de expertos del más alto nivel integrado, como Hernando Gaitán, director del Instituto de Investigaciones Clínicas de la Universidad Nacional.
 
El acuerdo ha hecho parte de un proyecto de investigación que adelantan varios países con la Organización Mundial de la Salud, incluida Colombia, el cual incluye el suministro de 25.000 vacunas, que serán importadas al país con la gestión del Invima.
 
El MinSalud ha asegurado que viene haciendo seguimiento, monitoreo y control al brote de viruela símica en el país, no obstante, la vacunación por sí sola no previene el contagio, y por ello la cartera ha dispuesto de la ejecución, desde septiembre pasado, de una estrategia pedagógica articulada a un dispositivo de vigilancia y prevención del riesgo.
   
En ese sentido, la cartera de Salud ha previsto estructurar un criterio de priorización para acceder a la vacunación con personas infectadas y que tengan mayor grado de vulnerabilidad. La clasificación de uso de esta vacuna en grupos poblacionales dependerá del comportamiento epidemiológico y disponibilidad de biológicos en el país.

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