Edición Médica

Juan Carlos Giraldo, director de la ACHC.

Redacción. Bogotá
La Asociación Colombiana de Hospitales y Clínicas (ACHC), ha informado que las Instituciones Prestadoras de Servicios de salud están presentando dificultades en la compra de medicamentos para brindar atención intrahospitalaria, a causa del desabastecimiento de los mismos durante la pandemia por COVID-19.
 
De acuerdo con la ACHC, una encuesta realizada a 70 prestadores adscritos de la asociación, ha evidenciado la escasez de 8 de los medicamentos más usados en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI).
 
La encuesta ha resaltado que, el 72 por ciento de las IPS encuestadas reportaron que tienen escasez de Midazolam, el 46 por ciento de Ketamina, el 41 por ciento de Fentanil, el 40 por ciento de Propofol, el 38 por ciento de Remifentanil, el 24 por ciento de Metadona, el 21 por ciento de Morfina y el 19 por ciento de Hidromorfona.
 
De igual forma, la ACHC ha señalado que, en promedio las IPS tienen reservas de estos medicamentos para 42 días. Por medicamento, se ha destacado la mayor reserva para la Fentanil con 58 días, la Morfina con 53 días y 50 días para el Remifentanil; en contraste para la Hidromorfona hay disponibilidad para 39 días y para el Midazolam 33 días en promedio de reservas y para el Propofol, la Ketamina y la Metadona el promedio varía entre 27 a 32 días.
 
Asimismo, la ACHC ha alertado que la situación de abastecimiento de los fármacos continúa empeorando, además el gremio indicó que algunos han inflado considerablemente su valor, como por ejemplo el Fentanil, que aumentó en un 95 por ciento, el Midazolam en 81 por ciento y el Propofol en 74 por ciento, los demás medicamentos mencionados también tuvieron alzas pero en un rango de entre el 5 por ciento y el 38 por ciento.
 
¿Qué hacer ante escasez de medicamentos?
 
Por su parte, Juan Carlos Giraldo Valencia, director de la ACHC ha solicitado al Ministerio de Salud (MinSalud) y al Instituto de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima), indagar junto con la farmaindustria, otras opciones para mejorar el abastecimiento de los fármacos y de ser necesario declararlos como vitales no disponibles para controlar los precios.
 
Cabe resaltar que, el gasto para los hospitales y clínicas en Elementos de Protección Personal se ha incrementado en 2020, en promedio 163 por ciento respecto al año anterior. Este gasto en un 72 por ciento ha sido asumido por las instituciones hospitalarias con cargo a su patrimonio, 9,2 por ciento fueron donaciones, 9,2 por ciento Gobierno y las ARL solo contribuyeron con un 7,5 por ciento y otras fuentes 1,7 por ciento.
 
Por ello, la ACHC ha pedido al Minsalud realizar el reintegro de los recursos a los prestadores, haciendo uso de los recursos del FOME y que en el corto plazo se incluya como una fuente permanente en el cálculo de la UPC, de manera que se restablezca en alguna medida el equilibrio perdido a causa de la asunción de un costo extraordinario que no estaba contemplado en la UPC o en tarifa alguna.
 

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